¡El quid de la cuestión! Pero lo cierto es que si estás aquí ya has empezado.
Tomar conciencia del problema ya es un paso muy importante y significa que empiezas a cuestionarte las cosas.
Y es que precisamente es imprescindible cuestionarse prácticamente todo sobre nuestra forma de vida e investigar mucho sobre la problemática de los residuos, el plástico y nuestra forma de consumo (pero no te agobies que hemos venido a intentar ponértelo fácil). El movimiento residuo cero abarca mucho más de lo que se suele pensar. Existe una cantidad enorme de información en todos los medios y plataformas solo hay que comenzar a buscar.
Nosotras comenzamos así. Introdujimos, poco a poco, en nuestras conversaciones cotidianas, cenas y terraceos, temas sobre sostenibilidad, plásticos, consumo, residuos, nuevas formas de enfrentarnos al día a día, nuevos productos que íbamos probando…en fin todo lo que nos iba surgiendo. Y gracias a estas conversaciones fuimos investigando a través de documentales, influencers, artículos, redes sociales, libros o podcasts.
Para ayudaros en los duros comienzos tenemos 5 consejos que funcionaron con nostras:
- Revisa tu basura ¿qué es lo que más tiras? Analiza tus residuos para poder luego plantearte qué hacer. ¡Te vas a sorprender cuando te pares a mirar tu basura!
- Busca alternativas que se adapten a tu estilo de vida. No es necesario querer cambiarlo todo de golpe, sino tratar de realizar pequeños cambios que podamos asumir. No te precipites y ves poco a poco
- Habla sobre ello. Seguro que a tu alrededor hay mucha gente preocupada por su forma de consumo. Quizás algunos ya hayan empezado el camino y otros se lo estén planteando. Tener alguien con quien comentar tu progreso es algo fantástico.
- Asume que no todo está en tu mano. A veces pensamos que es necesario un gran cambio para que las cosas mejoren y, aunque es cierto, debemos admitir que hay cosas que se escapan de nuestro poder. “Poquito a poquito se hace un muchito”
- Reutiliza y ponte creativo. A veces lo más sencillo es utilizar aquello que ya tenemos. Busca alternativas a cosas que ya tienes y que, de otra forma, acabarían en la basura: tarros de cristal como recipientes; tuppers sin tapa como cajones para cables; papeles medio pintados como papel en sucio; platos rotos como maceteros…
Si tienes algún otro consejo ¡comparte en RRSS! Estamos deseando leeros. :)